La correcta ejecución de las obras de modificación llevada a cabo por una empresa externa debe ser verificada a través de dos procedimientos:
- El primero llamado “calificación de instalaciones o IQ” consiste en una recepción estática a vacío para verificar que el cambio cumple con las especificaciones del dosier de referencia. Esta verificación fue realizada por el subcontratista que no detecta el error de conexión (tuberías sobre el rack no conectados sobre el colector).
- El segundo llamado “calificación operacional” en la presencia de líquido que realmente se utilizará más adelante. Esta verificación se llevó a cabo por la planta, asegurando que la conexión de la purga de nitrógeno en el reactor es de baja presión, pero sin comprobar el tipo de fluido.
- El accidente se debe a la verificación insuficiente de la correcta ejecución de la obra.
